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La respuesta a la pregunta hay que enmarcarla en un panorama de caída en nuestras reservas y producción de gas y petróleo. La productora más grande de gas, la cuenca Neuquina, declina alrededor de 4,5 a 5 MMCD, lo que es mucho, a lo que se agrega el decrecimiento de la cuenca NOA. Como contrapartida ayudan a compensar en parte la producción de yacimientos como Cerro Dragón y los off shore, Carina y Aries al disponer estos últimos de la reciente ampliación del gasoducto TransMagallánico
http://www.uia.org.ar/departamento.do?nid=934&id=4 , sin embargo en este caso, el cuello de botella es el Gasoducto San Martín, que debería ampliarse.
El fluido abastecimiento de gas natural para nuestro país no es un tema menor dado que representa el 51% de nuestra matriz energética primaria. Prácticamente se repite lo mismo para generación eléctrica, en donde la participación es del 45% debido al auge de la utilización de los Ciclos Combinados. Las centrales térmicas demandan más de 50 Millones de m3/día cuando hay disponibilidad de gas natural. Cuando la inyección no alcanza a cubrir la demanda total del sistema, las centrales termoeléctricas deben sustituir el gas por Gas Oil o Fuel Oil, según el caso.
Para resolver el déficit de producción de gas natural se importa gas de Bolivia (por ducto) y a partir del año 2008 comenzó a importarse GNL (por barco). Esta práctica concebida como un plan de emergencia para atender los picos de consumos invernales, se esta convirtiendo en permanente. Para este año, se prevé contratar 18 buques de GNL, 4 más que los que ingresaron en 2009.
A ello se agrega que para el año 2011 podría incorporarse otro buque regasificador que se sumaría al que está operando actualmente en el puerto de Bahía Blanca. La nueva planta regasificadora flotante se ubicaría, en principio, en la zona de Escobar con el fin de abastecer a las centrales térmicas de Campana y Timbúes.
La otra fuente de gas importado es Bolivia, vía gasoductos, en este caso debe mencionarse que la prioridad de abastecimiento es para el creciente consumo Boliviano (tener en cuenta EL Mutún), luego para Brasil y finalmente Argentina. Para abastecer esta demanda son necesarias obras de infraestructura (gasoductos y plantas de tratamiento y compresión), y lo mas importante, que Bolivia incremente la producción de gas de sus yacimientos. Para ello se requieren fuertes inversiones (US$ 1.500 MM), por parte de los productores que operan en el vecino país, ya que, según el Acuerdo Marco entre Argentina Bolivia, se prevé el envío de 15 millones de m³/d para el 2012-2014, y 25 millones de m³/d para el 2020-2027.
El gobierno nacional ha puesto en ejecución diversos programas PLUS para estimular la exploración y producción de nuestros yacimientos (por ejemplo Tight Gas y Shales), cuyos resultados se verán en el mediano plazo.
Volviendo a la pregunta formulada al comienzo de la nota, pareciera que aun siendo favorable el resultado de los programas PLUS, dirigidos a nuestras cuencas tanto on shore como off shore, el GNL será una variante que convivirá bastante tiempo con nosotros.
