Argentina, como voz del G77 más China, tuvo un papel significativo durante la Conferencia de las Partes (COP XVII), en la que se intentó definir el futuro climático posKyoto. La comitiva estuvo encabezada por la Embajadora en Asuntos Ambientales de la Cancillería, Silvia Mérega. Los puntos más fuertes propuestos fueron la adaptación al cambio climático y el tema del financiamiento.
El coordinador de Adaptación de la DCC y del tema para el G77, Lucas di Pietro, explicó que se discutió sobre el Proyecto de Trabajo sobre pérdidas y daños (con fuerte pedido de los insulares); los Planes Nacionales de Adaptación (que genera diferencias al interior del Grupo) y el Comité de Adaptación.
Martín Chojo, de Política Económica del Ministerio de Economía, informó sobre los mecanismos de financiación: sobre el Grupo de Contacto para Financiación a Largo Plazo y del Fondo Verde para el Clima, acordado en Cancún y para el cual los países desarrollados aportarán 100 mil millones de dólares al año 2020, el cual será compuesto por 10 miembros de países desarrollados y 10 en vías de desarrollo.
De parte de la Cancillería, Julia Hoppstock, se refirió a Comercio y Cambio Climático, quien puntualizó en la “transición justa”, de modo que no se pierdan puestos de trabajo y en los “enfoques sectoriales cooperativos” que “por primera vez se incluyen en una COP” y apuntan a la transferencia de tecnología a sectores relevantes como la agricultura, energía, silvicultura, transporte, entre otros.
El Director de Cambio Climático de la SAyDS, Dr. Nazareno Castillo junto con el subsecretario de Coordinación de Políticas ambientales, Armando Gandía.